El Reposacabezas

sábado, junio 30, 2007

Rojo




Llegué tarde. Se le acabaron los días rojos al tendero. Se me vino el mundo encima cuando me dijo que el último se lo acababan de llevar para regalo. Intentó conquistarme para venderme uno naranja. Me decía que era parecido, que total el rojo solo era un poco más intenso. Pero no. Yo quería el rojo. Como una tonta me puse a llorar. Y el propio día que había comprado el día anterior se volvió gris. Me entraron ganas de pegar una patada a su puesto y decirle que era un incompetente (como nos satisface eso). Pero controlé mis impulsos, me di media vuelta y me dirigí hacia casa. Por el camino se me llenó el cielo de nubes y pensé que si mi día verde había mutado en gris, podría hacer que también tornase a rojo. Y entendí que para hacer un día rojo solo necesitas las ganas de darle un beso a alguien, y el deseo de tener vaivenes de cadera. El resto depende de que lo perciba el planeta. Y suele conspirar fácilmente...

3 Comments:

  • ....menos mal, que con tanto rojo me habías asustado un poco.... :)

    By Blogger Unknown, at 30 junio, 2007 16:24  

  • De nuevo vuelvo a reencontrarme con las letras.. y de paso, vuelvo por estos parajes..

    Un abrazo ;)

    By Anonymous Anónimo, at 01 julio, 2007 20:17  

  • Los días rojos son especiales, a mi me encanta... pero a veces los de otras tonalidades logran sorprenderte.Sólo hay que estar atenta!
    Besos.

    By Anonymous Anónimo, at 01 julio, 2007 21:14  

Publicar un comentario

<< Home